ONGs venezolanas piden al Alto Comisionado de ONU sobre DDHH atender Derechos Universitarios en Venezuela.
En el marco de la participación ante el 165º período ordinario de sesiones de la CIDH, David Gómez Gamboa, director de la Comisión de Derechos Humanos de la Universidad del Zulia (LUZ) y de la Organización No Gubernamental Aula Abierta Venezuela y Mayda Hocevar, directora del Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad de Los Andes (ODH-ULA), asistieron a la reunión con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas, Zeid Ra’ad Al Hussein, y la CIDH en representación de distintas ONGs y Centros de Derechos Humanos en Venezuela.
Los mencionados defensores de derechos humanos le solicitaron expresamente al Alto Comisionado de las Naciones Unidas atender con prioridad la situación de los derechos humanos vinculados al sector universitario en Venezuela: Libertad Académica, Autonomía Universitaria, principio de no discriminación en el ámbito universitario, criminalización de la protesta contra universitarios, detención y procesamiento de universitarios ante la jurisdicción militar, entre otros temas.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos iniciaron ayer un nuevo y más profundo plan de cooperación, con la finalidad de abordar uno de los problemas más apremiantes en las Américas, como lo es la protección de las personas defensoras de los derechos humanos.
El presidente de la CIDH, el Relator para personas defensoras de derechos humanos de la CIDH y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, lanzaron el Mecanismo de Acciones Conjuntas para Contribuir a la Protección de las Personas Defensoras de los Derechos Humanos en las Américas en un acto público en Montevideo, donde la Comisión celebra su 165º período ordinario de sesiones.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos recalcó que las personas defensoras de los derechos humanos son esenciales para el funcionamiento saludable de las sociedades y, sin embargo, en los últimos años, en las Américas, han sido cada vez más atacados. Estas personas son víctimas de amenazas, campañas de difamación, detenciones arbitrarias, malos tratos, e incluso, tortura. Muchas de ellas corren el riesgo de ser víctimas de ataques violentos, a veces mortales, incluso por parte de particulares vinculados a intereses empresariales o a poderosas bandas criminales.
Por su parte, el Relator para personas defensoras de derechos humanos de la CIDH expresó que en las Américas, se observa una tendencia preocupante del uso de ley para criminalizar las actividades de las personas defensoras de los derechos humanos, para silenciarlas o castigarlas.
La CIDH y la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos ya cooperan ampliamente en casos emblemáticos de derechos humanos y situaciones de especial preocupación.